Convertir tu hogar en un refugio de paz y armonía es imprescindible para el día a día. Hay una clara tendencia de volver a los orígenes y a lo natural representado en el uso de la madera.
Este conjunto consta de un mueble de lavabo con dos cajones que queda suspendido para facilitar la limpieza en la zona inferior del mueble. Consta de una encimera porcelánica integrada en el lavabo convirtiéndolo en una sola pieza que mantiene el elemento lineal y evita rincones difíciles.
La zona de la ducha se ha diseñado facilitando la entrada de la misma en la esquina de forma que no entorpezca la zona de paso a la estancia y albergando el espacio suficiente para la circulación de las personas. El plato de ducha rectangular se ha colocado prácticamente a ras de suelo creando una continuidad en el espacio pero a su vez, teniendo una distinción con la tonalidad del pavimento.